Muchos pensadores coinciden en una misma idea sobre la libertad a la que todo ser humano tiene derecho, que se posee aún sin notarlo y que sin embargo cuando se siente que puede perderse, se lucha ferozmente por ella. No me refiero en este caso solo a la “libertad física”, sino también a la capacidad de “autodeterminación”, a la libertad de elegir ser libre, de decir y de crear lo que desees y no lo que te imponga una sociedad, un régimen o una simple tendencia o movimiento cultural.
Es por ello que resulta sumamente importante huir de cualquier circunstancia que nos conduzca a la alienación. Es preciso defender nuestras convicciones, dejar fluir de manera natural nuestra interioridad y sencillamente crear “un pensamiento nuevo cada día”
Considero que disponiendo de libertad es preciso que demos importancia al uso que hacemos de ella, ya que la libertad no es un fin en si misma, su fin está dado por el valor, que a su vez determina su altura. Revisando un poco el pensamiento de Frondizi encontramos:
“El concepto técnico y filosófico de libertad es la autonomía de escoger” esto es “determinarse a si mismo a querer, en el sentido amplio de escoger” (…) “La creación se inspira y mide por el valor que representa, pero también requiere libertad. No se puede crear por decreto. La creación exige libertad y convencimiento interior en la obra que se realiza” Frondizi R. (1992)
FRONDIZI Risieri, Introducción a los Problemas Fundamentales del Hombre”, Fondo de Cultura Económica, 1992 (p. 462).